Se encontraba vislumbrada por su éxito laboral y se creía que todo lo podía hacer o lograr, que ya era autosuficiente y que no necesitaba que sus padres para superarse. De forma ingeniosa un día por la madrugada se levantó temprano prendió el televisor, saco unas bolsas que tenía escondidas con su ropa y se preparó para partir no sin antes dejar una nota de despedida en la cual dentro de su texto indicaba que ella quería ser libre y hacer su vida, que no necesitaba seguir estudiando, que por favor no la fueran a buscar, ni que la fueran a llamar al trabajo, hasta que aceptaran que ella era independiente y compartieran su filosofía.
Como imaginaran
grande fue el asombro de sus padres al encontrar el televisor prendido sin
nadie que lo viera y el miedo que surgió al encontrar la nota sobre el sofá.
Esperanza rompió en llanto, mientras Roberto en cólera, ambos sintiéndose malos
padres, culpable de la conducta de su hija, temerosos puesto que Mónica había
sido clara en el porqué se iba, pero no decía a donde. Fue un día fatídico para
estos padres pues el móvil lo tenia apagado y en el trabajo no querían dar
razón de su patoja.
Lentamente fueron pasando los días tortuosamente para estos progenitores, pero ...
Muy buen fragmento lo dejas muy interesante. Te mando un beso
ResponderEliminarGracias amiga, espero contar con tu presencia para la próxima edición, te envio un fraternal abrazo desde mi querida Guatemala
ResponderEliminarQue mal momento para esos amantisimos padres. Un disgusto dificil de digerir..
ResponderEliminarBesos, estimado escritor. Muchos saludos 🎄🎅🏻⭐💞🌺
Un tiempo difícil para estos padres, quienes nunca imaginaron lo que les tocará vivir con su retoño, gracias amiga por tu valioso comentario, felices fiestas y bendeciones es desde mi querida Guatemala
ResponderEliminarsiempre un placer pasar y leerte
ResponderEliminarme gusta tu estilo de escritura